Vedema. Santorini. Grecia

Recepción

Y como siempre, por casualidad, llegamos a dar con este hotel.

Tan fácil como: única isla a la que había vuelo la mañana siguiente de un tortuso vuelo Estambul/Atenas y única isla con hotel libre.

Voy a obviar comentar el viaje que tuvimos Estambul/Londres/Atenas/Estambul porque esto va de dulzuras y no de pesadillas... 

Total, que buscamos por internet cualquier hotel y apareció Hotel Vedema en Santorini. Uno de los TOP TEN de este Dolce Far Niente Blog

Una vez hecha la presentación iremos por partes.

Llegar al aeropuerto de Atenas, vuelos Nacionales, y ver la multitud, desbarajuste y sobre todo, los "aviones" que hay que coger para ir a ciertas islas es, cuanto menos, para pensarse si ir... Y si remarco que la hora de salida a casi todas las islas es entre las 5 y las 6 de la mañana pues ya no sé si seguir...

Sigo :-) 

Desde Oia

Santorini es uno de los sitios más bellos que he visto en toda mi vida, Es curioso, por que cuando llegamos al mini aeropuerto, una pista y ya, cogimos el coche con chofer que nos puso el hotel y recorrimos, de noche, sin dormir, agotados y con hambre, la isla, una vez más tuve el pensamiento de querer salir corriendo de allí, me ha pasado muchas muchas veces en sitios que a las pocas horas, descubro que son perlas de la naturaleza, Santorini es, quizás, una de las más bellas perlas por multitud de cosas.

Exterior de las habitaciones 

Este blog va de cosas bonitas y de vida disfrutada, pero centrándome en hoteles, restaurantes, copas o trato exquisito, si me pongo a hablar de sensaciones y momentos vividos, regalos de la naturaleza, de la historia y de la bien dirigida, a veces, mano del hombre, este blog sería no sólo eterno sino una guía pormenorizada de como cada uno vive sus sentimientos, no se trata de eso, los sentimientos es lo más subjetivo del ser humano, sólo doy pistas sobre como disfrutar más aún de los lugares que visitamos en determinados momentos.

Así que, para ver todo lo que hay ver en Santorini, que es mucho, muy bello, mágico, lleno de luz y color y un placer de los que seguro nos lleva de cabeza al infierno, busquemos en San Google, por ejemplo: Santorini (hay muchos más sitios que nos hablan de esta isla de dioses)

Playa roja

Una vez llegados al hotel, hecho el check in y después de dormir hasta el medio, despertarse en una habitación completamente blanca con detalles en azul, las ventanas de obra llenas de luz, un brillo especial y una temperatura ideal, fue como estar en el más bello cielo.

Detalle: te reciben con copa de champagene y/o zumo de naranja... que no pude disfrutar porque la hora sólo me permitía disfrutar de mi cama. Y algo importante, decidimos quedarnos una noche más y ellos nos gestionaron hasta el cambio del vuelo, mmmmmm detalle de los que yo considero lujo y no una escalera de mármol con pasamanos bañado en oro (pequeñas diferencias en el significado de las palabras)

El Hotel tiene diferentes construcciones, todo blanco y respetando espacios de luz. La única puerta de acceso es una construcción de piedra al estilo Exin Castillos.

La recepción, separada, con arcos y escaleras de piedras pintadas de blanco, inmaculado, las habitaciones dispuestas de dos en dos o de cuatro en cuatro, con terrazas, jardines... su tamaño depende de si son suits, suits VIP o habitaciones normales (el precio es astronómicamente diferente pero en ningún caso de andar por casa)

La piscina y desayuno, son como de casita de la barby, todo pequeñito, bonito, con una discreción que hasta te da pena caminar entre las mesas. Por no hablar de, no sé la razón, pero el hotel, al menos cuando yo he ido, estaba lleno de parejas de chicos, chica y chico, mujer y hombre ¡todos guap@s hasta rozar la impertinencia!

En fin, que fue despertar y estar en el paraíso.

Puerta de acceso al Hotel

El capítulo desayuno merece mención especial, creo que es una parte importante en los hoteles. Todo lo que sea desayuno en mesas enormes (si no es domingo y se trata de un brunch a las 2 de la tarde) con 100 clases de pastelitos industriales, 20 tipos de zumo "de bote", café en máquina y jamón york rosita, es un desayuno de "todo incluido, mucho por poco" por mucho que haya un señor haciendo huevos al gusto en directo. De esos desayunos yo huyo cual virus mortal.

Estuve en el Hotel Vedema hace ya 16 años así que, todo puede haber sufrido modificaciones.

Recuerdo el desayuno (no sé la hora pero si yo lo tomaba es que era tarde) en mesas dispuestas alrededor de la piscina de la barby, con manteles de hilo hasta el suelo y con adornos de rosas blancas. Unos camareros bellísimos te preguntaban por tu gusto con el té o el café, por supuesto recién hecho, y luego subías a la parte del bar donde había un pequeño buffet de frutas, pastelitos calientes, zumo de naranja en jarras de cristal muy fino y cubiteras llenas de hielo y delicioso champagne de todas las marcas posibles, ahí fue mi primer descubrimiento  de las burbujas en cristal de bohemia. 

De la parte salada no me acuerdo así que, aunque la imagino, no puedo describirla. 

Del desayuno ibas directamente a la piscina, sin pasar por la casilla de salida ¿para qué? si el paraíso estaba en el propio hotel. 

Aunque recomiendo alquilar un cochecito, mono y a poder ser descapotable, y recorrer la isla, es de lo más bonito que mi retina recuerda. 

Apartado comidas, es importante  ir bien puesto y eso no significa "ir de boda" de hecho "ir de boda" está contraindicado. Por ir bien puesto hablo de sexys a la par que elegantes: un pareo transparente con una camiseta blanca y unos tacones plateados. Un short vaquero y camisas anunadas o camiseta de colores, una pamela o flores en el pelo y tacones a juego. Un vestido largo o corto y anunado al cuello con chancletas planas o medio tacón. Ellos: vaqueros o bermudas vaqueras o  "chinos"  con polos y camisetas, jamás traje de baño ni bermudas de cuadros... (mejor eso nunca)

Todo esto no es por nada, es sólo para que nos sintamos a gusto con la gente guapa, comensales y servicio. Uno se siente un poco como en una revista super trendy... ¡¡¡pero relax total!!!

Las cenas mejor ir sin pareos ni bermudas :-)   con trajes monos al uso para ir a un restaurante cool en Madrid.

El SPA es un tesoro a descubrir, utilizan productos de las mejores marcas, todos ecológicos, bio.. 

El hotel está lleno de rincones para descansar, perderse, relajarse. Es una cura de placer absoluto. Los amantes de las fotos pueden dejar la cámara en casa porque de una simple caída del móvil al suelo sale una buena foto. 

Sin duda el Hotel Vedema es uno de mis Top Ten (hasta ahora) 

Me gusta su arquitectura, los colores, es una experiencia en blanco y azul completamente relajante. La gastronomía, mezcla de cocina francesa y cocina griega, resuelta de manera exquisita.

Escribiendo este post, 16 años después de visitar este hotel, sé que debo volver, aunque, y esto sirve como ANEXO, de unos años aquí el hotel ha cambiado, ahora es mucho más grande, con villas, nuevas construcciones... quizás mejor seguir con el recuerdo de una perla no vaya a ser que el collar entero quite valor a lo esencial.

Miss A